Mallorca

 

Mallorca es un sueño hecho realidad. Imagínate playas que parecen de postal, con el agua tan cristalina que puedes ver cada pececillo nadando a tu alrededor. Te tienes que perder en esas calas escondidas, como Cala Varques o Cala S'Almunia. Son como mini paraísos donde puedes estar casi sola, ¡y el color del agua es de otro mundo!

 

 

Yo he tenido la suerte de ir muchísimas veces (ya perdí la cuenta), ya que mi familia materna es de allá, entonces a mi mamá le trae nostalgia y recuerdos preciosos. 

Eso sí, te tengo que recomendar algunas cositas:
1. Te recomiendo alquilar auto, de lo contrario hay calas que puede ser complicado llegar
2. Si alquilas un auto, que no sea muy grande. Los caminos son estrecho y puedes pasarlo mal con una furgoneta.
3. Si vas en temporada alta, llega temprano a las calas, estas son pequeñas y puede ser que te quedes sin espacio.

Ahora te cuento lo que más me gustó a mí.

Resumen

 

Mallorca es la isla más grande de las Baleares, en el Mediterráneo, y tiene un clima súper agradable todo el año: en verano hace calorcito para disfrutar de la playa (28-32°C), en invierno es suave (10-15°C), en primavera empieza a despertar con temperaturas entre 15-22°C y en otoño todavía hay días cálidos y soleados (20-25°C).

 

Cómo llegar:

  • En avión desde Madrid (aprox. 1h 30min) o desde otras ciudades de España y Europa.

  • También se puede llegar en barco desde Barcelona, lo que te da una experiencia más de “viaje marítimo” y vistas al Mediterráneo.

 

Yo cuando voy con mi familia, generalmente nos quedamos en Pollença, porque mi papá alquila una casa y vamos todos juntos, lo que hace que el viaje sea súper cómodo y familiar.

Calas imperdibles:

 

  • Cala Formentor: agua cristalina y arena blanca, un clásico de postal.

 

  • Cala Deià: pequeñita, súper pintoresca y con un ambiente tranquilo.

 

  • Cala Mondragó: perfecta si quieres naturaleza y un poco de caminata.

 

  • Cala Varques o Cala Mesquida: ideales para un día relajado sin multitudes.

Pueblos más lindos:

 

  • Valldemossa: calles empedradas, cafeterías y el encanto de la Mallorca tradicional.

 

  • Deià: bohemio y rodeado de montañas, perfecto para fotos.

 

  • Sóller: con su famoso tren antiguo y un centro adorable.

 

  • Pollença: nuestro base, con plazas bonitas, mercados y ambiente familiar.

 

  • Alcúdia: Tiene un casco antiguo amurallado, con calles estrechas llenas de tiendas, cafés y plazas con encanto. 

Lugares top para cenar:

 

  • Restaurantes frente al mar en Port de Pollença, con pescados frescos y arroces.

  • Deià o Valldemossa para cenas románticas con comida local y vistas de montaña.

  • Palma de Mallorca tiene muchísimos sitios cool: desde tapas modernas hasta restaurantes de lujo en el casco histórico.

 

Mi zona favorita, IMPERDIBLE:

 

Tim’s Bar es un lugar icónico en el Puerto de Andratx, Mallorca, conocido por su ambiente cosmopolita, vistas al mar y vibrante vida nocturna. Situado en la Avenida Almirante Riera Alemany, 7, es el sitio ideal para disfrutar de un cóctel al atardecer, música en vivo y una cena relajada frente al puerto.

 

Ambiente y música en vivo

Tim’s Bar es famoso por su ambiente relajado y moderno, con una decoración que invita a quedarse. Ofrece música en vivo todas las semanas al atardecer, creando una atmósfera animada y acogedora para locales y visitantes.

 

Centro de Palma:

 

  • Imperdible el Casco Antiguo, la Catedral, el Palacio de la Almudaina y pasear por las callecitas llenas de tiendas y cafeterías.

 

  • Paseo marítimo: ideal para tomar algo mientras ves el puerto y los yates.

 

 

Mallorca tiene de todo: calas de ensueño, pueblos con encanto, buena comida y un centro vibrante en Palma, perfecto para combinar relax y turismo en un solo viaje.

 

 

¡Agrega un comentario con TUS tips de este destino!

 Así poco a poco vamos armando un viaje increible juntando ambas experiencias. 

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