Este museo es una visita obligada para cualquier amante del arte. Aunque puedes pasarte horas explorando sus vastas colecciones, si tienes poco tiempo, asegúrate de ver las obras más emblemáticas, como la Mona Lisa, la Venus de Milo y la Victoria de Samotracia. La arquitectura del Louvre, que era originalmente un palacio, es impresionante por sí misma, y el contraste entre el antiguo edificio y la moderna pirámide de cristal es fascinante.

¡Ay, la Place de la Concorde en París! Es de esos sitios que, aunque hayas visto fotos, en persona te impresiona. Imagínate llegar a una plaza enorme, abierta, donde cada rincón tiene algo especial que contar. Está justo al final de los Campos Elíseos, y lo primero que te llama la atención es ese obelisco egipcio en el centro.

La plaza en sí es gigantesca, pero también tiene detalles preciosos, como dos fuentes enormes que parecen sacadas de una postal. Una representa los mares y la otra los ríos de Francia, y cuando las luces de la ciudad caen sobre ellas al atardecer, es un espectáculo. ¡Es tan parisino, tan elegante!

No puedes irte de París sin dar un paseo por el Sena, especialmente al atardecer. Las vistas de los puentes y edificios iluminados son simplemente mágicas. Puedes hacer un paseo en barco o simplemente caminar por las orillas. ¡Es una experiencia romántica y relajante!

Uno de los mejores planes es hacer un paseo en barco por el Sena al atardecer; verás monumentos icónicos como la Torre Eiffel y la Catedral de Notre-Dame iluminados, lo que lo convierte en un momento muy especial. También hay muchos bares y clubes en áreas como Le Marais y Montmartre, donde puedes disfrutar de música en vivo o simplemente relajarte con un cóctel.

Aunque está en restauración, sigue siendo impresionante. La arquitectura gótica es una locura, y la vista desde el exterior es hermosa. Está situada en la Isla de la Cité, así que puedes pasear por los alrededores y disfrutar del ambiente. Recuerda tomarte un tiempo para admirar las gárgolas y los detalles en las fachadas.

Versalles es un destino fascinante y uno de los lugares más emblemáticos de Francia, famoso por su impresionante palacio y jardines. Aquí tienes un resumen sobre lo que puedes encontrar en Versalles:

Palacios y Jardines

• Palacio de Versalles: Este majestuoso palacio fue la residencia de los reyes franceses, comenzando con Luis XIV, conocido como el Rey Sol. Es famoso por su arquitectura, salones deslumbrantes como el Salón de los Espejos y una rica historia que refleja la grandeza de la monarquía francesa. 

• Jardines de Versalles: Los jardines son una obra maestra del diseño paisajístico, con fuentes, esculturas, y avenidas simétricas que se extienden por más de 800 hectáreas. Los jardines están llenos de flores, estatuas y caminos, ideales para pasear y disfrutar.

Lamentablemente yo no he podido ir a Disney Paris, pero es un pendiente muy importante que tengo.

Si te gustan los parques temáticos, Disneyland es una opción divertida. Mis amigas que han ido, han pasado un día completo disfrutando de atracciones, espectáculos y la magia de Disney. ¡Díganme si no es el plan perfecto para ir con amigos o familia!

París es considerada la capital mundial de la moda, y no es difícil entender por qué. La ciudad alberga numerosas casas de alta costura y diseñadores de renombre, como Chanel, Dior, Louis Vuitton y Givenchy. Durante la Semana de la Moda de París, la ciudad se convierte en el epicentro de las tendencias globales, donde diseñadores presentan sus colecciones de primavera/verano y otoño/invierno.

Las calles de París, especialmente en áreas como Le Marais, Saint-Germain-des-Prés y Champs-Élysées, están llenas de boutiques de lujo, concept stores y marcas emergentes. La moda parisina se caracteriza por su elegancia atemporal y un enfoque en la calidad y la artesanía. Además, el estilo personal de los parisinos, que mezcla l

¡Tienes un recorrido por algunas de las casas de moda imprescindibles en París, junto con sus museos!