Paris con tu perrita

París tiene mil caras: luces, historia, cultura, terrazas animadas… y sí, también se puede vivir con tu perro. En este viaje, mi perrita fue mi copilota en cada plan, y juntas descubrimos lo fácil (y a veces no tanto) que es recorrer la ciudad con cuatro patitas extra.

🌳 Parques y paseos que no se pueden hacer con perros
- París es precioso para pasear, pero… ⚠️ ojo: la mayoría de parques no permiten perros. Aún así, las calles, los bordes del Sena y las zonas abiertas compensan. Mi recomendación: pasear por los alrededores de la Torre Eiffel o perderse por Le Marais, que tiene rincones ideales.
- No podrás entrar a museos y zonas cerradas turísticas.
- Tampoco podrás entrar a iglesias y catedrales.
- Olvídate de ir a Disney Paris, nosotros ni lo intentamos.
Yo te recomiendo que siempre lleves un bolsito y preguntes al guardia de cada lugar. A mi perrita, cuando la veían en mis brazos, en general la dejaban pasar.

🏨 Dónde alojarse: Elysées Bassano Hotel
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Ubicación top: a menos de 10 minutos del Champs Élysées y 20 caminando de la Torre Eiffel.
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Conectividad ideal: rodeado de restaurantes y muy bien comunicado.
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Lo mejor: camas MUY cómodas (bendición después de patear París todo el día).
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Pet friendly: no tuvimos ningún inconveniente con la perrita.

🚲 Moverse por París con perro
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La bici fue nuestra mejor amiga: alquilamos bicicletas con Vélib’ por solo 3,45€ (45 min) y todo se gestionó súper fácil desde la app. Lo mejor: mi perrita iba en la cesta, feliz de pasear con las orejitas al viento.
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Caminar: París se disfruta paso a paso, aunque aviso: a veces terminarás con 20.000 pasos sin darte cuenta.
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Metro: aceptan perros en transportín o con bozal, pero sinceramente la bici fue más cómoda.
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Uber/taxi: depende del conductor, pero en general no tuvimos problema si vas siempre con transportín.

🍴 Restaurantes probados (y aprobados)
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Entrecôte: pedimos el clásico plato de carne con salsa de mantequilla + patatas. Un básico parisino que nunca falla.
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La Mascotte: brunch delicioso. Mis tostadas de aguacate con queso feta y cherry venían con una ensalada espectacular, muy bien aliñada.
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Bistrot de la Tour Eiffel: cenamos con la Torre iluminada de fondo (mágico y no tan caro). Mi ensalada Cobb tenía de todo: pollo, bacon, queso azul, huevo… top.
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Le Marceau (cerca del hotel): probamos sopa de cebolla, tartar clásico y de postre crepes de Nutella. Muy parisino y muy rico.

💡 Tips prácticos
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🚲 Descarga Vélib’ Métropole: las bicis fueron lo más cómodo y barato.
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🐶 Llévala en bolso o cesta, y lleva siempre agua + bolsitas.
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📷 La cámara vale la pena: París pide fotos.
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👟 Zapatillas cómodas: aquí se camina (mucho).
Viajar a París con perro es posible, aunque no tan libre como en otras ciudades europeas por el tema de los parques. Aún así, la experiencia fue mágica: ver la Torre Eiffel iluminada con mi perrita en brazos no tiene precio. París nos regaló recuerdos inolvidables… y un montón de fotos con orejas felices y croissants de fondo.



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Así poco a poco vamos armando un viaje increible juntando ambas experiencias.
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