Bezau
En febrero de 2025 tuve la suerte de conocer un pueblito de cuento: Bezau.
Por temas laborales, me invitaron, junto a mi jefa, a conocer los inicios de una marca de cosmética muy reconocida a nivel internacional: Susanne Kaufmann.
La marca comenzó en el Hotel Post de Bezau, cuando Susanne tomó la administración del hotel y decidió tener su propio spa. En la página web de Abanuc pueden conocer un poco más sobre la marca:
Antes de contarles mi experiencia en Bezau, les cuento un poco del lugar:
Bezau es una localidad situada en el estado de Vorarlberg, en el oeste de Austria. Se encuentra en el valle de Bregenzerwald, una región conocida por sus paisajes alpinos, arquitectura tradicional de madera y gastronomía típica.
Dato Freak: Población aproximada de 2.000 habitantes.
Día 1
El primer día viajamos desde Madrid hasta Suiza, para luego tomar un bus de casi dos horas hasta Bezau.
Al llegar, nos dieron la bienvenida y nos contaron sobre la experiencia que viviríamos durante nuestra estadía.
Esa noche conocimos a Susanne Kaufmann, una mujer muy cariñosa, emprendedora y pionera en el mundo de la belleza. Fue una experiencia muy linda compartir ese momento con ella.
Hotel Post by Susanne Kaufmann
El hotel es un maravilloso hotel boutique; me recordó mucho a lo que puedes encontrar en el sur de Chile (o en el norte de España).
Está rodeado de naturaleza, literalmente a los pies de los Alpes austríacos.
El hotel transmite una vibra holística, con ese olor a madera de pino, chimenea y bosque. Tiene una zona lounge con barra y varios sillones, donde puedes pedir algún tentempié, tomarte un café o una copa.
También cuenta con una zona de spa, que no solo tiene múltiples cabinas para hacerte los tratamientos más relajantes que puedas imaginar, sino también piscina al aire libre, piscina temperada, jacuzzi, bañeras de hidromasaje, reposeras con vista a los Alpes, gimnasio, sauna y un montón de otras cosas.
Día 2
Este día fue toda una aventura...
Comenzamos con una clase de yoga a las 8:30 a. m., algo que no era precisamente mi plan perfecto. Pero, una vez que llegué a la sala de yoga, mi perspectiva cambió rotundamente.
Era un salón enorme, rodeado de ventanales con vistas increíbles: pura naturaleza y los mismísimos Alpes austríacos.
Luego hicimos una caminata increíble por la naturaleza, durante la cual nos contaron la historia de Bezau, su cultura y cómo viven en el día a día. Es un pueblo sacado de un cuento de Disney, realmente bonito y digno de conocer.
Luego tuvimos una tarde de película: tarde de spa.
Tuve un tratamiento facial en uno de los mejores spas que he conocido. Disfruté de sus piscinas, saunas y descansé con las mejores vistas.
Día 3
De este día no les contaré mucho, ya que fuimos a conocer la fábrica donde se elaboran los productos de Susanne Kaufmann.
Solo puedo decirles que cuidan cada detalle; es una marca en la que se puede confiar al 100 %.
Luego viajamos de vuelta a Suiza, para finalmente regresar a Madrid.
En Resumen...
- Volví a Madrid enamorada de la marca Susanne Kaufmann.
- Volví a Madrid recargada de naturaleza.
- Volví a Madrid después de haber descubierto una gastronomía única y sofisticada.
- Volví a Madrid con imágenes en mi cabeza de una arquitectura meticulosa y con una fuerte tradición en el uso de la madera.
- Volví a Madrid taaaaaan feliz :)
¡Agrega un comentario con TUS tips de este destino!
Así poco a poco vamos armando un viaje increible juntando ambas experiencias.
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